Esta es una actividad perfecta para hacer el finde con los peques, podéis aprovechar para hacerla ahora que todavía hace buen tiempo, se puede "trabajar" fuera de casa y así minimizamos el riesgo de "accidentes". Que unir pintura y niños, a veces (como uno de los estados de facebook que, por cierto, nunca he acabado de entender: será algo así como tengo pareja pero llevo la lucecica de "libre", no?)... "es complicado".
Necesitamos una caja de fruta, vino,... de esas de madera, pinceles, pintura, unos cojines y, si hemos dedidido hacerla con nuestros peques y estos son "revoltosillos", unas clases previas de relajación. El resultado quedará más o menos así.
También podéis "ahorraos" el trabajo de pintarla, dibujais apenas un detallito para personalizarla y ¡listo!
O con unas viejas maletas que pensabais tirar, claro que aquí hay que currarselo un poquito más.
En cualquier caso y sea cual sea el modelo elegido la "fabricación" es la parte fácil, ahora queda lo verdaderamente difícil, convencer a nuestro animalito de que esa cosa tan mona y que con tanto cariño le hemos preparado es su cama. ¡Suerte!
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