LÁMPARA CON AIRE RETRO

Esta mañana, en la oficina, mirando un "cutre-portalápices" que tiene cierto compañero (¡¿Quien no ha usado alguna vez una lata de conserva como portalápices?) se me ha ocurrido que seguramente este humilde elemento de uso cotidiano está desaprovechado y que podría dar mucho juego así que (en lugar de ponerme a pensar, cosa harto cansada y aun absurda cuando descubres de que otros ya lo pensaron antes que tú: "Un pensamiento nunca es único") me he puesto a buscar por la red y he encontrado unas lámparas realizadas con latas de conserva que son BBB: Bueno, Bonito y, sobre todo, Barato. Aunque quizás estás concretamente no sean lo que se dice baratas pero la idea si lo es.

Un BRILLANTE, nunca mejor dicho, diseño de Willem Heeffer, que utilizó en este caso las míticas latas de Sopa Campbell por todos conocidas ya que fueron motivo de alguno de los cuadros (Campbell's Soup Cans) del no menos mítico Andy Warhol, padre del PopArt.

No sé si es o no fácil encontrar latas de Campbells por aquí, de todas formas ¿quien dice que no puede tener el mismo "Glamour" una lámpara de "Fabada X", "Tomate fritoY" o "Aceitunas rellenas Z"? Al final, las superfamosísimas latas de sopa no eran más que eso, latas de sopa, hasta que Warhol las "adopto". Y si no os acaban de convencer el resultado de vuestra lámpara "al natural" siempre podéis darle una manita de pintura y/o decorarlas al gusto.

Me subyuga la idea, perfecta para darle un toque industrial y retro a la decoración de cualquier casa. Bueno, no, no nos engañemos, no creo yo tampoco que encajen en cualquier ambiente. No me las imagino colgando del techo del salón de cualquiera de las "casitas" de, por ejemplo, la Duquesa de Alba.

Si no sabéis como hacer la instalación eléctrica de la lámpara podéis encontrar ayuda aquí, yo no me hago responsable de lo que pueda pasar. Eso sí, un consejito tonto: antes de poneos a toquitear los cables "cortar" la corriente. Y otro más tonto aun: cuando encendáis la luz después de colgar vuestra estupendísima pantalla apartaos tanto como podáis... no vaya a ser que explote. jeje. En realidad no creo que llegue a pasar eso pero es que a mí me da pánico todo lo que tenga que ver con la electricidad, me enrampo continuamente con cualquier aparato y claro "el gato escaldado...".